Arte contemporáneo, antigüedades, mercado, coleccionismo

Casas de Subastas
<< volver

El mercado del arte latinoamericano

Dos veces al año, las subastas internacionales de mayor repercusión toman el pulso al mercado del arte latinoamericano. Los grandes autores consagrados siguen siendo los que más se cotizan, pero empiezan a aparecer artistas emergentes.

Texto por Manuel García Blázquez

La situación socieconómica internacional y la crisis en la que están sumidos algunos países latinoamericanos influyen de manera directa en la compra de obra artística. No parece que sea un buen momento para alcanzar grandes cotizaciones, como asegura Juan Varez, consejero delegado de Christie´s en España y especialista en pintura antigua, además de buen conocedor del mercado latino ya que formó parte del impulso que dio esta firma, hace tres años, a las subastas de obra de autores contemporáneos del subcontinente. La inversión en arte latinoamericano se realiza, fundamentalmente, en los propios países del área, se calcula en un 70 por ciento aproximadamente, por lo que se resiente la situación socioeconómica de lugares tan importantes como Argentina, México, que tampoco atraviesa un buen momento, Colombia, sumida en una permanente inestabilidad y guerra no declarada desde hace décadas, y Brasil, con altibajos a pesar de una mayor estabilidad. La confianza, entonces, no es plena, por lo que las casas de subastas y las galerías tienden a una política realista y algo conservadora dejando que el mercado decida, evitando “grandes riesgos” ya que, de ser así, quizá la obra no se vendería.

Pero, por contra, si la crisis está ahí, es, por ese mismo motivo, un buen momento para la inversión, ya que, según las casas de subastas y las galerías consultadas, los precios de las obras se mantienen, así como las cotizaciones.

De cualquier forma, como asegura Ana Sokoloff, responsable del departamento de arte latinoamericano de Christie´s, el entusiasmo de los compradores por este arte se manifiesta en cada una de las subastas, como ocurrió en la última de noviembre de 2001, en la que se alcanzaron grandes cotizaciones de obras de autores como Fernando Botero, Rufino Tamayo o Remedios Varo, acompañadas de récords de cotización de otros autores contemporáneos de menor nombre como Sergio Camargo.

Departamentos propios

Las casas de subastas siguen, sin embargo, apostando por las obras latinas, incluyendo aquí todo lo que abarca desde el arte colonial, muy escaso debido a la fuerte protección, hasta las obras de las vanguardias contemporáneas y las tendencias más actuales. La primera casa de subastas que abrió un departamento propio para la obra de América Latina fue Sotheby´s. Ya en el año 1977 realizó la primera subasta de pintores mexicanos, y en 1979, la primera en exclusiva de arte latino. Desde entonces, no han faltado a la cita bianual, como tampoco lo han hecho en Christie´s desde que se sumara, dos años más tarde, en 1981, con el departamento de arte latinoamericano que, según sus propias palabras, ha tenido un espectacular crecimiento con el paso de los años.

Pero las casas de subastas no están solas en la promoción de los artistas de América Latina. Si el mercado, después del de la propia tierra, está centrado fundamentalmente en Estados Unidos, tímidamente se abre camino en Europa. Los autores consagrados, de trascendencia internacional, no necesitan ninguna tarjeta de visita para tener buena consideración y cotización en todo el mundo, ya sea entre los coleccionistas, especialmente de los autores del surrealismo, o en los museos de arte contemporáneo más importantes. Por eso, el mayor esfuerzo se está realizando con los autores contemporáneos o más actuales, que llegan a Europa a través de las principales ferias, como la Documenta, de Kassel, la feria de Basilea, la de Colonia, y, en España, Arco, en Madrid, o Foro Sur, la Feria Iberoamericana de Arte Contemporáneo de Cáceres.

Las galerías también apuestan por tener autores jóvenes del subcontinente hermano. Entre ellas, Soledad Lorenzo, con Alejandra Varejao entre las colaboraciones, o Elba Benítez, con artistas como Ernesto Neto (Río de Janeiro, 1964), Beatriz Milhazes (Río de Janeiro, 1960), Vik Muniz (Sao Paolo, 1961) o José Antonio Hernández Díez (Caracas, 1964). La galería Oliva Arauna tiene entre sus autores a los fotógrafos Alfredo Jaar (Chile, 1956) y al brasileño Miguel Rio Branco. Entre estas galerías destaca la Fernando Pradilla, de Madrid como las anteriores, por su dedicación casi en exclusiva a autores de los países latinoamericanos. Abierta hace menos de un año, tiene la experiencia de quince años de trabajo en Bogotá en la galería El Museo. Según palabras del propio Fernando Pradilla, la proyección a nivel global del arte contemporáneo latinoamericano es cada día más notable. Cerca de veinte artistas de varios países, especialmente colombianos, argentinos, venezolanos o mexicanos, completan el catálogo al que se suman algunos autores españoles.

En Internet

El interés por el arte latinoamericano está presente también en los medios puestos al alcance fácil de todo el mundo por las nuevas tecnologías. La casa Sotheby´s dispone desde enero de 2000 de un espacio para el arte latinoamericano en su sitio de Internet. Una categoría especial con lotes de más de 100 artistas a la que se suma otro apartado como el de Arts of Mexico. Como suele ser habitual, aparte de la puja de determinadas obras, se puede comprar obra a precio fijo.

Desde España se puede acceder a sitios especializados, fundamentalmente Latinarte.com, con 3.500 obras de 500 artistas de 12 países, adonde se llega desde la “gran avenida” comercial de Doocollect.com. También con la posibilidad de adquirir obra a precio fijo o participando en las subastas ocasionales de algunos autores. En las paginas de Mercart.com se encuentra, igualmente, obra de autores contemporáneos de prestigio del área latinoamericana.

Los autores consagrados

Un nombre, que se ha convertido en mito y objetivo permanente de coleccionistas, lleva rompiendo desde hace años los moldes de los récords de cotizaciones que no siempre son fáciles de conseguir: Frida Kahlo. La obra de esta representante del surrealismo latino supera habitualmente el millón de dólares y todo lo que ella “haya tocado” puede, igualmente, formar parte de una subasta. Precisamente, en la última de Christie´s de arte latinoamericano en Nueva York se presentaba un lote (precio estimado 30.000-40.000 dólares) con, entre otras cosas, vestidos de la artista y una carta escrita, junto con Diego Rivera, a Leon Trotsky.

Los mismos nombres se repiten una y otra vez en todas las subastas. Ellos no necesitan de ninguna presentación y es muy raro que las crisis socioeconómicas de América Latina influyan en su cotización, ya que el interés transciende fuera de las fronteras y su obra se compra desde cualquier lugar del mundo, aunque prime el mercado norteamericano. En España, el interés por esta obra parece que es creciente, especialmente desde hace unos tres años, como asegura Juan Varez, de Christie´s, aunque no se compre tanto y siempre menos de lo que se debiera, por la indecisión de los coleccionistas y particulares. El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía adquiere obra y realiza periódicas exposiciones, como la última que finalizó a mediados de mayo sobre Xul Solar.

De esta lista “primus inter pares” nunca faltan, además de Frida y Rivera, el colombiano Fernando Botero, el cubano Wilfredo Lam, los chilenos Matta y Claudio Bravo, los brasileños Emiliano di Cavalcanti, Tarsila do Amaral, Sergio Camargo, Alberto da Veiga Guidnard o Alfredo Volpi, el uruguayo Joaquín Torres-García y, por extensión, todo lo salido de su escuela, los también mexicanos José Clemente Orozco, Rufino Tamayo, David Alfaro Siqueiros o Remedios Varo, el argentino Xul Solar, el escultor de Costa Rica Francisco Zúñiga o los venezolanos Armando Reverón, Alejandro Otero y Jesús Rafael Soto.

El precio de las obras varía, entre otras cosas por su tamaño, pero siempre presenta precios altos. En la subasta de mayo de Christie´s había lotes muy valorados con obra importante de Rufino Tamayo, como “La tierra prometida” (Israel de Hoy) (1.000.000-1.500.000 dólares), “Los vendedores de pescado” (300.000-400.000 dólares) y “Fuego”, ésta vendida en Sotheby´s (800.000-1.000.000 de dólares); de Wilfredo Lam, “La Sierra Maestra” (400.000-600.000 dólares); de Fernando Botero, “La pica” (400.000-600.0000 dólares), y de Matta, “The Ecclectrician” (400.000-600.000 dólares).

Las nuevas promociones

Algunos autores están presentes y repiten obra en las principales subastas internacionales de Cristie´s y Sotheby´s como los cubanos Tomás Sánchez (1948), asociado a la nueva figuración cubana de los años 60-70 del pasado siglo, o José Bedia (1959), Guillermo Kuitca (Argentina, 1961), Tunga (Brasil, 1952), Adriana Varejao (Brasil, 1964) o el fotógrafo chileno Alfredo Jaar (1956); pero la mayoría de los artistas va ocupando su lugar a través de las promociones de las principales ferias internacionales y de las galerías que apuestan por las expresiones últimas del arte. La lista de los autores actuales puede hacerse interminable pero, junto a los citados, se repiten en la selección, entre otros, Beatriz Milhazes (Brasil, 1960), Ernesto Neto (Brasil, 1964), Vik Muniz (Brasil, 1961), la fotógrafa cubana Marta María Pérez Bravo (1959), Priscila Monge (Costa Rica, 1968), María Fernanda Cardoso (Colombia, 1962), Doris Salcedo (Colombia, 1958) o José Resende (Brasil).

La idea y concepción artísticas de todos los autores actuales de América Latina no entiende de países. Muchos, de hecho, viven o trabajan con frecuencia en Europa y en Estados Unidos, y lo común no existe, como tampoco una catalogación pura en una técnica creativa. Como se ve con frecuencia en las ferias, destacan también aquí muchos nombres asociados a la utilización creciente de la base fotográfica como expresión.

Elevadas cotizaciones en Christie´s y Sotheby´s

1

Vendedora de flores, 1942

Diego Rivera

Vendido por 2.970.000 dólares

Noviembre 1991, Nueva York, Rockefeller Center.

2

Niños Jugando con fuego, 1947

Rufino Tamayo

Vendido por 2.202.500 dólares

Mayo 1994, Nueva York, Rockefeller Center.

3

La conquista de México

Escuela mexicana, siglo XVII

Serie de ocho

Vendido por 2.036.500 libras

Diciembre de 1999, King Street, Londres.

4

Mulher deitada com Peixes e Frutas, 1956

Emilio Pettoruti (Argentina 1802-1971)

Vendido por 886.000 dólares (Fue récord del artista)

Noviembre de 2000, Rockefeller Center, Nueva York.

5

Nubes sobre la laguna, 1996

Tomás Sánchez (Cuba, 1948)

Vendido por 314.000 dólares

Junio de 2000, Rockefeller Center, Nueva York.

6

Sin Título, tríptico, 1968

Sergio Camargo (Brasil 1930-1990)

Vendido por 501.000 dólares (récord del artista en subasta).

Noviembre de 2001, Rockefeller Center, Nueva York.

7

Composition symetrique universelle en blanc et noir, 1931

Joaquín Torres-García (Uruguay 1874-1949)

Vendido por 937.000 dólares (récord del artista en subasta)

Mayo de 1995, Rockefeller Center, Nueva York.

8

Reclining figure, 1985

Fernando Botero (Colombia, 1932)

Vendido por 413.000 dólares

Noviembre de 2001, Rockefeller Center, Nueva York.

9

Plano de Juchitán, 1961

Francisco Toledo (México, 1940)

Vendido por 446.000 dólares (récord del artista en subasta)

Noviembre de 2000, Rockefeller Center, Nueva York.

10

L´Esprit veillant, (The Watchful Spirit) 1944

Wilfredo Lam (Cuba, 1902-1982)

Vendido por 827.500 dólares

Noviembre de 1999, Rockefeller Center, Nueva York.

11

Tres destinos, 1956

Remedios Varo (México 1900-1963)

Vendido por 556.000 dólares

Noviembre de 2001, Rockefeller Center, Nueva York.

12

Contemplador de la Cascada, 1996

Tomás Sánchez (Cuba, 1948)

Vendido por 160.000 dólares

Noviembre de 2001, Nueva York.

13

Sin Título, 1937

Roberto Matta

Vendido por 160.000 dólares

Noviembre de 2001, Nueva York.

14

Paquete, 1966

Claudio Bravo (Chile, 1936)

Vendido por 204.000 dólares

Noviembre de 2001, Nueva York.

15

Sandías (Fette d´Anguria)

Rufino Tamayo (1899-1991)

Vendido por 1.215.750 dólares

Noviembre de 2000, Nueva York.

16

Panorama de la ciudad de Sao Paulo, 1821

Arnaud Julien Palliere (1783-1862)

Vendido por 830.750 dólares

Noviembre de 2000, Nueva York.

17

Florero, 1976

Fernando Botero (1932)

Vendido por 473.250 dólares.

Mayo de 2001, Nueva York.

18

Prueba de nuevo (De la serie de Los Monstruos), 1963

Jorge de la Vega (1930-1971)

Vendido por 335.750 dólares.

Mayo de 2001, Nueva York.

19

Cazadores de mariposas, 1948

Rufino Tamayo

Vendido por 446.000 dólares

Noviembre de 2001, Nueva York.

20

América

Rufino Tamayo

Mural

Vendido por 2.600.000 dólares

Mayo de 1993, Nueva York.

21

Abaporu

Tarsila do Amaral

Vendido por 1.300.000 dólares

Noviembre de 1995, Nueva York.

22

Vaso de Flores, 1939

Alberto da Veiga Guignard

Vendido por 761.500 dólares

Junio de 1999, Rockefeller Center, Nueva York.

23

La fruta bomba, 1944

Wilfredo Lam

Vendido por 937.500 dólares. Comprado por el C. A. Reina Sofía.

Junio de 1999, Rockefeller Center, Nueva York.

contador de visitas